Descripción
ORIGEN
La historia sitúa el origen de la planta de haba en Asia Menor y el norte de África, desde donde llegaron a Europa en el siglo XIII. Los antiguos egipcios pensaban que las habas eran impuras y que dentro de ellas se escondían las almas de personas fallecidas. Por fortuna, la creencia no prosperó en Europa, desde donde los españoles la llevaron a América. Allí encontraron terrenos propicios para su cultivo en las zonas frías y templadas de los Andes. Desde entonces se ha convertido en un ingrediente muy apreciado en la gastronomía latinoamericana.
BENEFICIOS NUTRICIONALES
Las habas secas tienen un alto contenido de folato, el cual es esencial para el crecimiento de nuevas células. Ayuda a prevenir la anemia por favorecer la producción de glóbulos rojos y por ser una fuente natural de hierro. Además es rica en vitamina B1.
PREPARACIÓN
Se deben remojar en agua por lo menos 24 horas y asegurarse de cambiar el agua un par de veces durante ese tiempo para poderlas cocinar. Si se van a freír, también es necesario remojarlas.
PLATOS
Se pueden comer tostadas, fritas, en sopa, guisadas y estofadas.
