Descripción
ORIGEN
Tras su floración, el árbol de tamarindo produce unas vainas dentro de las cuales se encuentra la legumbre que lleva su nombre. El Tamarindo es originario de África, más exactamente de Sudán, desde donde se extendió a buena parte del continente y a la zona meridional de Asia. Cuando los europeos iniciaron sus expediciones hacia Oriente intentaron cultivarlo en sus países, pero la planta no prosperó. Fueron los españoles quienes lo llevaron con éxito a México, donde hoy es muy apreciado. El tamarindo también se consume en Centroamérica y en el área del Caribe.
BENEFICIOS NUTRICIONALES
Es una leguminosa con alto contenido de potasio el cual ayuda a mejorar la comunicación entre los nervios y favorece la circulación de nutrientes de las células. También contiene gran concentración de vitaminas, entre ellas las C, B1, B2, B3, B5, K y B6. Contiene asimismo minerales como fósforo, hierro, folato, zinc, selenio, cobre, calcio, azufre y magnesio.
PREPARACIÓN
La pulpa de tamarindo Fruttimanía no necesita descongelarse. Solo basta con añadir la pulpa en el recipiente en el que se va a hacer el zumo y se mezcla con agua o leche.
PLATOS
La versatilidad del tamarindo permite su utilización tanto en elaboraciones dulces como saladas. En la cocina se busca aprovechar su sabor agridulce, en sopas, cremas, guisos de carne, pescado o legumbres. También se le consume fresco o en bebidas (como en el agua de tamarindo), e incluso sirve como ingrediente en la elaboración de caramelos.
